10 de febrero de 2007

Infancia y adolescencia ¿divino tesoro?

En su último Consejo de Ministros como titular de la cartera de Justicia Juan Fernando López Aguilar, ha llevado la modificación del artículo 154 del Código Civil español; que rocogia : "Podrán también corregir razonable y moderadamente a los hijos". Ningún padre podrá buscar en estos vericuetos de la ley, para "razonablemente", reprimir físicamente las actuaciones de sus retoños, por mucho que crispen los nervios. La educación, como la letra, con sangre; no entra.

Hoy me encuentro en Sevilla, en la Alameda de Hércules; mi barrio. Acabo de pasar por el lugar desde el que mi madre hace ya muchos años, a voz en grito, me llamaba - yo no me enteré - y seguí mi camino junto al "Canijo" y "El Negro" para ir a los futbolines de la Europa - casi na -. Todo porque mi prima vino a recogerme para ir a Triana, mi lugar de nacimiento y yo no hice caso a los requerimientos, para irme a la calle San Jorge.

Pues bien, mi madre, dudo mucho que conociese el pre-citado artículo, procedió razonablemente. El rifle era de plástico, sé rompió en mi espalda. No volví a marcharme sin autorización.

La temática del programa "Callejeros" de la Cuatro emitido ayer, era sobre los adolescentes. Mal panorama pinta la cosa. Sexo, alcohol y poco rock and roll.

Aparecían criaturas de todo tipo. Desde la que llamaba literalmente a sus padre de "hijos de puta", hasta los seguidores del Opus Dee, que mostraban todo sus respetos por sus padres y el prójimo, aunque alguno dejaban de entrever sus ganas de pecar.

Como siempre, el País Vasco deja algo en mí. Un grupo adolescente se reúnen en un txoko. Un local pagado entre todos y que mantienen con pulcritud. Preguntada una chica, sobre las características de los componentes del grupo, ésta indicó : Somo cuarenta y ocho, cada uno con unas ideas, y unas características.... todos nos respetamos y convivimos.

¡¡ ¿Porque no invitarán a esos txokos a sus mayores? !!.

Sevilla, diez de febrero de dos mil siete, San Amancio; bautizo de mi sobrino Francisco Javier.


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